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4 de agosto de 2015

Bocambao #3.

Como comentaba en la anterior entrada, llegamos a Cambutal de casualidad. Al no haber disponibilidad en Morrillo, a última hora cambiamos el plan y nos dirijimos a nuestro recién descubierto destino.

Cambutal está al sur de la península de Azuero, a unos 45 minutos de Playa Venao. Nos tocó conducir varias horas para llegar, queda un poco a desmano de todo.

 Aguantó como un campeón nuestro compañero de aventuras

Debe ser por eso que a penas está expotado. Se respira una tranquilidad increíble. Hay varios hoteles, algún pequeño restaurante y poco más... Playa, pescadores, palmeras y olas.

Por internet encontré un hostel que tenía muy buena pinta, Hostel Kambutaleko. De buenas a primeras el nombre me mosqueó, enseguida pensé, hostias, estos son de allí. Y efectivamente el hostel lo lleva una pareja vasca (muy buena gente). Es un lugar muy acogedor, en lo alto de un pequeño cerro con unas vistas espectaculares. Lo cierto es que nos trataron tan bien y estábamos tan a gusto, que decidimos pasar de dormir en Venao y únicamente ir de paso a surfear. Pero no adelantemos acontecimientos.

 Salir de la habitación y encontrarte con esto... ¡Top!

 Un buen sitio para otear la costa

Como decía llegamos a Cambutal sin saber realmente qué olas nos íbamos a encontrar. El dueño del hostel, Jon, que también surfeaba, nos explicó qué olas tenían en la zona y cómo llegar hasta ellas. Al ser ya algo tarde, nos decantamos por lo más sencillo, la playa que nos quedaba delante.

 Os prometo que tengo más camisetas... :-)

Ni cristo en el agua

Fue un baño muy sin más. Olas fofas, no muy largas precisamente... Pero bueno, después de unas 5-6h de coche, llegar y darte un baño pues es un puntazo, y más con el calor panameño. Nos reservábamos "lo bueno" para los próximos días.

El segundo día en Cambutal madrugamos para checar la mar y ponernos en marcha. Con nuestro carro de alquiler, nos dirigimos a Corto Circuito, en teoría la mejor ola que hay por la zona. Nos comentaron que teníamos que cruzar un par de quebradas, "nada serio, simplemente pasa con confianza, no te quedes parado en medio". Ya, claro.

El camino hasta Corto Circuito, "Corto" como le llaman los locales, no es sencillo. Son todo pistas, al principio parece fácil, un par de bajadas fuertes hasta el primero de los ríos. Llegamos y nos bajamos claro, uno no está acostumbrado a cruzar ríos en coche. No cubría mucho así que le dimos caña y listo. Después llegaron más y más pistas. De camino pasamos también por 411 (Cuatro Once), tenía muy buena pinta, como otras muchas olas que vimos de camino, pero decidimos que queríamos llegar hasta la famosa ola de Cambutal.

Pintaza... 411

El segundo de los ríos tenía más caudal y cubría algo más, pero también pasó sin problemas, al menos a la ida...




A medida que nos acercábamos descubríamos nuevas olas sin gente, completamente vacías... Al final empiezas a ponerte nervioso, todas esas olas perfectas, rompiendo sin gente... ¿Merecerá la pena ir hasta el final de la playa? ¡Si ya hay olas aquí!


Y al fin llegamos. La vimos romper y todas nuestras dudas quedaron atrás... Encontramos el puto Shangri La.



Surfeamos durante horas. Derechas largas, con fuerza y unas 15 personas como mucho en el agua. Entramos respetando, surfeando primero más abajo para acabar en el pico arriba. Qué buenas olas. Había algún que otro local que le metía de lo lindo, gente simpática por lo general, no tuvimos ningún tipo de problema.

El camino se las trae pero merece mucho la pena. Se puede ir por un camino que sube un monte, con un 4x4 claro, que te deja delante de la ola, varios locales aparcaban allí, e incluso había gente acampada. Nuestro coche de alquiler hizo una intentona, pero decidimos dejarlo del otro lado y caminar un poco más.

Hay que andarse con ojo con las mareas. Cuando la marea sube la playa a la que sólo llegan los 4x4 queda aislada, nosotros habíamos dejado ahí las toallas y tal, por lo que no pudimos volver a cruzar, las olas rompían contra las rocas... Al final unos locales muy enrrollados nos llevaron en su 4x4 hasta donde habíamos aparcado nosotros.

Eso es todo por hoy. En la próxima más y más fotos.

Hasta entonces: ¡Salud y buenas olas!

6 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Aventurillas varias con final feliz en este caso jeje

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  2. Que tal Ekaintc!
    Uf..., nos has puesto los dientes largos...jeje Como siempre agradecido de disfrutar de estos magnificos post de tu blog. Las fotos una gozada. Has mencionado algo que desgraciadamente se echa en falta (aunque ya sabemos lo que suele suceder en verano...), yo es algo que de unos años a esta parte estoy notando..."entramos respetando" Me quedo con esa actitud/intención.
    Un saludo y hasta la proxima!

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    1. Claro Fran, debería ser así en todas partes, sobre todo pues eso, al entrar en un sitio nuevo...
      Gracias a ti por pasarte hombre.

      Saludos y buenas olas!!

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